Los libros son un paseo por el mundo, la ciencia y las aventuras fantásticas. Jugar con ellos estimulará en tus pequeños el gusto por la lectura. Te contamos cómo
Jugando con libros es posible abrir la puerta a emociones, hazañas, experiencias y múltiples vivencias. Esta actividad estimulará en l@s niñ@s el interés y el placer de leer.
Para que los pequeños y no tan pequeños del hogar tengan un momento muy especial, les presentamos unas ideas diferentes para realizar juegos en casa usando libros. La editorial mexicana, ateconqueso, propone entretenimientos super divertidos.
¿Pero cómo jugar con libros sin leerlos? ¡Aquí tenemos la respuesta!
Veo, Veo…
En este juego podemos usar un libro flexible como telescopio, los demás jugadores deberán estar volteados al jugador del telescopio y deberán adivinar lo que ve.
Los participantes podrán realizar preguntas: ¿Lo que ves: de qué color es? ¿Es un ser vivo o una cosa? ¿Grande o chico? Hasta adivinar,…
El primero que gane será el siguiente en tener el mando del telescopio.
Construye tu colonia
En este pasatiempo pondremos libros y otros objetos simulando edificios, parques, autos, animales y cuánto recordemos.
Lo divertido es que desarrollamos la memoria, pues podemos acordarnos de qué color es la casa de junto, si hay un parque, ¿Qué hay en el parque, dónde están los juegos o la fuente? ¿Cuando íbamos a ese parque, siempre encontrábamos a los mismos perros?
En fin, es una idea muy interesante, tendrá a los chicos entretenidos durante mucho tiempo jugando con libros, aprendiendo a relacionarse con ellos y a quererlos.
Libros al agua
En este caso es importante usar los libros especiales de ateconqueso que se pueden mojar.
En la tina, la fuente o en una cubeta con agua, metamos los libros y que los niños decidan si se meten al agua a rescatarlos, los pescan como si fueran peces, o si los leen dentro del agua.
La creatividad de los pequeños es increíble y seguramente disfrutarán enormemente de estas actividades que estimularán su placer por la lectura.
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